domingo, 13 de junio de 2010

Juan Luis

Que podré escribir, de ti. Amigo, Juan Luis. Si cuando hablamos de libertad, tu mirada de niño se torna altiva y segura. Si cuando hablamos de poesía, te maravillas y sonríes. Tu mi musa, tu el sendero que lleva el viento, ese día caluroso, al sembrador cansado; al marginado al final de su ardua jornada. Tu, el sol, que despierta a los arados y le da vida a las mariposas. Juan Luis, que pequeño es el mundo, visto desde tus ojos, que grande es, visto desde tus manos, pero en definitiva, me gusta más, verlo desde tu boca. Esa que dibujo a mi antojo, con el lápiz de Córtazar y la melodía de Delgadillo...

No hay comentarios:

Seguidores